viernes, marzo 31, 2006

Otra vez primer día.

Veredas mojadas, baldosas sueltas, paraguas ajenos que amenazan con sacarte un ojo, lluvia de esa suave pero persistente, un vientito que te sale de una esquina, un par de alpargatas que supieron ser blancas y unos jeans empapados hasta la rodilla. Nada como caminar por Santa Fé una mañana lluviosa.
Llego a la parada del 37 y ya hay 20 personas esperando un linea 3 o 4. Putéo porque todos los años es lo mismo, mientras los 20 me miran con cara de pena y de "pobre boluda, se olvidó el paraguas", y a mí me entran unas ganas báraras de decir que no, que no tenía ganas de agarrarlo, que me encanta mojarme yendo para Ciudad...

Menos mal que no creo en los presagios, porque si no ya me habría vuelto para Trenque.


Banda Sonora: Algo de Aerosmith.

miércoles, marzo 29, 2006

Sólo una semana...

Me entero que Elba (una de las tías gordas) se había muerto. Me hago a la idea. Voy a visitar a Celia. Me dice que se quiere mudar. Recibo dos llamadas de Luis que las atienden mis viejos. Voy a ver a mis abuelos. Armo los bolsos en menos de una hora. Dejo andando el grupo y la página. Me acompañan Fran y Lucas a la terminal. Después me entero que Germán me vio pero que no se animó a saludarme. Me vengo. Voy a Ciudad a buscar los horarios, pero no junto la libreta porque la Cede de Estudiantes estaba hasta las manos de nuevitos en el CBC (pobres ilusos). Hacemos las compras generales. Me compro El Quijote por sólo 25 mangos. Damos vuelta el depto. Por ende, ahora tengo una cama. Por ende, puse el cubrecamas de mi abuela en funcionamiento. Compramos acrílicos y pintamos las cajas. Probé por primera vez depilarme con cera. Me compré un kilo de uvas en una verdulería que tenía el mismo olor que la despensa de mi abuelo cuando el restoran estaba en la quinta, una mezcla entre olor a pan rayado, aire húmedo y caliente y verduras (cuanta nostalgia). Compramos mezcla para pegar azulejos en frente a una plaza donde todo era triste, y su gente sumamente depresiva. Fuimos a la Plaza el jueves a la noche, y saltamos y gritamos, y volvimos anchas como el mundo. En el colectivo un flaco se me acercó y me dejó un boleto con su msn. Nos juntamos con las chicas a pabear y cenar, y terminamos yendo a tomar algo a Jobs. Dos flacos se nos sentaron al lado y nos empezaron a chamullar con tan poco éxito que se fueron enseguida. Fuimos a lo de las tías de Flor a cenar y ver pelis, y nos terminamos quedando hasta las 5 de la mañana.
Tanto para una semana...


Banda Sonora: Algo... rock pesado (not my taste)

jueves, marzo 16, 2006

Lluvia y Vals

El sol brilla en un cielo impecable. La mañana está fresca para un día de verano, pero ya todos sabemos que el otoño nos espía desde la esquina . Sólo algunos charcos desperdigados en el parque y el asfalto, y el balde y el trapo en el centro del living, delatan que la noche anterior fue una sola lluvia, más fuerte, mas suave, pero sostenida.
Es una ironía haber vivido 12 años en una casa de suelos bajos disfrutando de la lluvia para ahora correr muebles y cosas del avance del agua en un segundo piso.


Banda Sonora: yeong wook jo - the last waltz.

martes, marzo 14, 2006

Los cuentos de la tía Celia

Celia es una tía que es mi abuela postiza. Es la hermana de mi bisabuela, y cumple 73 el próximo lunes. Siempre voy a verla cuando ando por Trenque, y entre tortas, dulces, café en saquitos y (cuando no) licores caseros, me cuenta cada tanto las típicas historias de familia que se escuchan en la sobremesa de las fiestas.
Como cuando era chica y con sus hermanos creían que los teros eran bichos deformes por tener las patas tan largas e iban y se las cortaban a la altura de las rodillas (no entiendo cómo hacían para atraparlos), o cuando hacían tortas de barro con los huevos del gallinero.
Pero creo que ni sumando todas sus diabluras de chicos se puede lograr una historia digna de un cuento como las que tiene en su haber ya de grande, ya sea de ella o de sus hermanos.
Entre esas está la vez que llegó al hospital con una tijera en el cachete del culo, porque tratando de bajar los racimos de uvas de la parra se cayó de la silla en la que estaba parada, y, al querer atajarse, le quedó la mano de la tijera debajo.
Otra es la que me contó de su hermana, que haciendo un budín encontró sólo un molde de torta común. Como necesitaba algo para hacer el centro, no tuvo mejor idea que poner una lata de arvejas... cerrada, y lo dejó al hermano cuidando el horno. Menudo susto para el tío, cuando la lata reventó y bañó toda la cocina de arvejas...


Banda Sonora: The Strokes - Room on fire.

miércoles, marzo 01, 2006

En solo unas pocas semanas...

Este blog otra vez se me empacó, y no hay forma de que me publique los posteos. Pero como dijo Flor, no hay perro que no se parezca al dueño, así que acá estoy, empacada con que funcione de una puta vez.

Empezó marzo... 3 semanas... No me importa, no me importa. Estoy en casa, estoy en casa. El futuro lo pienso mañana...

Pero es un impacto.

Vieron esa propaganda de magistral?, la de que cuánto pueden cambiar las cosas en 8 semanas?. Si cuento 4 para atrás y 4 para adelante, a esa propaganda mi vida le pasa el trapito. Y si cuento 8 para adelante, la de Flor gana por afano. Loca!!, en ese tiempo capaz que ya tenés a tu nueva hermana en brazos!.


Banda Sonora: Jewel - Inocense Maintened.