viernes, mayo 26, 2006

Perdiendo rastros

Primero que nada:

¡¡¡Feliz cumple Fran!!!
Ahora, el post:
Salía a buscar a una amiga. Fui a la casa, pero estaba en remodelación, no parecía que viviera ahí. Fui a la casa de la madre. Se mudó. Fui a la casa de la abuela, ese lugar a dónde siempre iba a buscar información sobre su papadero siempre que perdía la pista (algo que me ha pasado varias veces). Siempre vivió ahí, a esa casa siempre se volvía, por más veces que ella y su madre se mudaran, y siempre podía encontrarlas ahí.
Cuanta consternación, cuando vi la casa arregladita, una ventana y portón nuevo, otros muebles a través del vídrio, y ya sin tocar la puerta supe que no iba a conocer a nadie.
No le llegan mis mails y el número de teléfono que tengo es viejo y sólo salta un contestador. Otro número más viejo aún está dado de baja.
¿Cómo puede desaparecer toda una familia del mapa de uno así, como si nada?.
Cuanto cambia Trenque mientras estoy afuera...