Ayer, 11 a.m.. Suena el teléfono. Me levanto de la cama y corro a atender.
- Hola, ¿hija?. Estamos acá con tu abuela en Florida y Larrea. ¿Sabés cómo podemos hacer para llegar hasta tu casa?¿Nos lleva el subte?.
- Eh...
Mi cerebro recorrió en piloto automático los pocos fragmentos del mapa de Buenos Aires que pudiera retener, repitiendo las calles en voz alta, y tratando de recordar por dónde carajo pasaban, mientras la parte más conciente, y decididamente embotada, trataba de captar la idea de que mi viejo estaba acá... ¡¡Y qué carajo hacían acá!!.
Flor me había escuchado desde la cama.
- Eso anda por el microcentro.
¡¡Ya séeee!! ¡¡Pero eso es Baires!! ¿O no?. Realmente, mi viejo tendría que avisar cuando viaja.
- Si, Flor.
- ¿Pa?. Mirá, en Plaza de Mayo tenés un boca de subte, pero tenés que tener una ahí nomás. La línea D, la verde. Bajate en la estación Pueyrredón.
- ¿Pero estoy bastante cerca, no?. Podemos ir caminando.
- Eh... Nnnnooo, no estás muy cerca... Haceme caso y tomate el subte.
- Bueno, ya vamos a ver qué hacemos...
Y cortó. Porfiado como siempre.
Banda Sonora: Lluvia...No llego a escuchar la radio...
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3 comentarios:
Bueno... Me enteré q te compraron el monitor! y una impresora tmb! (la cual vas a traer aca xq allá no va a andar... haceme caso... no intentes hacerla funcionar con esa compu... despues, cuando te vea en el MSN t explico xq).
AH! te dejaste aca el CD de tu amiga Ivi y las fotocopias esas q me hiciste sacar.
Bueno, nada mas, conectate de vez en cuando, yo estoy casi todos los dias desde las 11 o 10 pm
Y llegaron? O son la pareja que aparece en los cartones de Cindor?
Llegaron. Y me hicieron caso. Doble sorpresa.
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